No hay recuerdo más bonito que el que perdura en el tiempo por eso cuando nuestros amigos, familiares o seres queridos cumplen años, celebran eventos o conmemoraciones no hay detalle mejor que reflejarlo en cerámica.
Un trofeo o una copa de premio es dificil de ubicar en nuestra casa y al final termina guardada con las cosas que no sabemos donde poner. Una placa cerámica como las que hoy os estoy enseñando de agradecimiento o como premio por cualquier labor puede ser un bonito cuadro para enmarcar o poner en cualquier rincón del salón o la biblioteca.
Se puede personalizar poniendo un monumento, un texto alusivo, un logo o cualquier tema que tenga que ver con el personaje homenajeado o con el evento.
Las placas que os he mostrado están pintadas sobre esmalte S. XVIII y dos son de 20 x 30 cms. y la otra un poco mayor de 25 x 40 cms.
Últimas opiniones